domingo, 1 de diciembre de 2013

martes, 2 de julio de 2013

Las ventajas o desventajas de las tarjetas de cliente

He estado recopilando tarjetas de clientes para escribir este artículo, tengo que reconocer que hay de todo tipo y por ahora no he encontrado una manera de ahorrar con ellas.

Ya hablaré con detalle de esto más adelante pero quería que supierais mi opinión sobre ellas.





Los pequeños comercios ayudan a la gran economía

En el último examen de valenciano superior había unos temas propuestos para hacer una redacción; Yo elegí el que hablaba sobre el futuro de los pequeños comercios frente a las grandes superficies.
Si bien no aclaraba cuál era mi previsión, no muy halagüeña para las tiendas del centro de la ciudad, que no para las tiendas de los centros comerciales... ahora mi punto de vista ha cambiado.

Acabo de ver un documental en la televisión francesa sobre los últimos cambios que ha experimentado la ciudad de Nueva York, como la gran manzana se ha convertido en un gran manzano. Ya sabéis que la ciudad nace en la isla de Manhattan, núcleo de la economía mundial, y sus trabajadores cruzan el río Hudson hacía los barrios residenciales, donde viven con sus familias. Allí organizan pequeños barrios nacidos de la emigración global. Gente de todo el mundo que viene a destacar a nivel internacional.

Debido a las reformas de los dos últimos alcaldes la ciudad ha dado prioridad a los espacios verdes y la caída de la delicuencia, dos causas lo han propiciado. Primero, aprovechan los solares del ayuntamiento para plantar jardines y huertos e incluso gallineros. También con el carril bici, antigua vía del tren. Segundo, organizan patrullas nocturnas de vecinos para ahuyentar a los vagabundos. Por último, restauran edificios antiguos y los alquilan, abaratando su coste.

Pero lo que realmente me ha llamado la atención ha sido como, por ejemplo, el barrio de Brooklyn conocido por su mala fama ahora alberga otro paisaje. Tiendas pequeñas de diferentes países sustentan a los bloques de la periferia, haciendo posible la vida sin dependencia de la big apple. Esta idea me ha llenado de esperanza.

Yo antes vivía en el centro de la ciudad y me he ido a vivir a la periferia; ahora echo de menos tener cerca los edificios burocráticos y las tiendas.  Debido a la búrbuja inmobiliaria se han hecho pequeñas islas de edificios algunos casi sin habitar y otros sin terminar, con lo cual tenemos un panorama desolador. Pero ver que es posible cambiar el mobiliario urbano para mejorar esta situación con la sola implantación de pequeños comercios y zonas verdes que proporcionan nuevos empleos, hace que vislumbre unos "brotes verdes" en esta crisis que ahora nos azota.